El sensor de color permite conocer casi cualquier color de una superficie. Al contar con 4 LEDs para iluminación, no es necesario que el sistema cuente con iluminación externa.
Pude detectar casi cualquier color de una superficie ya que detecta la cantidad de color rojo, verde y azul de manera separada y proporciona un pulso digital cuya duración depende de la cantidad de color detectado.
El sensor de color TCS230 es un convertidor de luz a frecuenca que combina fotodiodos de silicio configurables y un convertidor de corriente a frecuencia en un solo chip. Los LEDs se utilizan para iluminar el objeto a escanear de la forma más uniforme y neutra posible, por lo que para la medición no necesita la luz ambiental, es más no se recomienda para que no falsee los resultados.
Es ideal para líneas de fabricación, robótica y domótica.